La carrera espacial inaugurada en 1957 por la Unión Soviética puso al mundo en un contexto global, la humanidad miraba hacia el espacio, en el que se proyectaban las ambiciones y deseos de futuros impensados. Esta carrera condujo a que un 20 de julio de 1969, llegara la primera expedición humana a la Luna.
La propuesta visual que Ortúzar inauguró entre 1966-1967 –que hasta ese entonces se había centrado en pinturas de carácter matérico– recoge estas influencias, integrando en su obra las estéticas de la Guerra Fría y las evoluciones de la técnica moderna, cuyas alusiones al mundo de las conquistas espaciales lo definen como un artista hijo de su tiempo. La serigrafía “Coloquio de los Humanonautas” (1967), expuesta en 1968 junto a las obras “Transformación” y “Tres humanonautas”, en la III Bienal Americana de Grabado en el Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad de Chile, es representativa de esta nueva mirada, que hizo evolucionar la obra de Ortúzar desde una estética local hacia una estética global, conocida en EE.UU como “cool pop”.
La obra “Coloquio de los Humanonautas” es parte de la catalogación que estamos realizando en el marco del proyecto de investigación Fondart 2023. La obra fue serializada en un tiraje de 22 ejemplares, las que se ubican actualmente en la colección del Museo de Arte Contemporáneo (MAC) y en colecciones particulares.
Si conoces obras de Carlos Ortúzar en colecciones privadas o públicas, colabora con el catastro que está impulsado el Archivo del artista. Esperamos tus datos en el correo contacto@archivocarlosortuzar.cl
Crédito de la imagen: “Coloquio de los humanonautas” (1967) 9/22 Detalle. Colección Particular Andrea Aguadé Bru. Fotografía Lorna Remmele.